QUÉ ES
COMPARTE es una comunidad de aprendizaje y acción que, desde una visión integral, busca construir alternativas de desarrollo socioeconómico de impacto territorial. Nace con el liderazgo del Sector Social de la Conferencia de Provinciales de América Latina (CPAL) y ALBOAN en junio de 2011. Desde entonces, la red de organizaciones sociales de la CPAL hace suyo COMPARTE y se asume como un programa más de la conferencia latinoamericana.
COMPARTE es un espacio de aprendizaje y acción compartido entre 16 organizaciones latinoamericanas y ALBOAN que queremos mirar críticamente nuestra práctica, reflexionar sobre ella y generar una nueva práctica. Esta comunidad tiene el convencimiento de que podemos aportar, desde nuestra sencillez, a la reflexión teórico-práctica sobre el desarrollo y a la creación de alternativas viables, posibles y queridas por las personas empobrecidas con las que trabajamos.
Los puntos de interés entre las organizaciones que venimos participando son muchos y muy amplios. El debate y las prácticas de promoción del desarrollo son aún más amplios y complejos. Conscientes de ello, hemos tenido que trazar rutas de trabajo que nos permitan consensuar enfoques y maneras de construir y compartir prácticas y saberes. La comunidad ha tenido que dotarse de cierto andamiaje metodológico, organizativo y de comunicación que nos permita reflexionar nuestra práctica, compartir esa reflexión, teorizar sobre ella y volver a la práctica para recrearla.
LA VISIÓN DEL COMPARTE
Nuestro objetivo central es la construcción de propuestas alternativas en el ámbito económico productivo, a través de la generación de conocimiento y reflexión desde nuestra experiencia y la mejora de los procesos económico-productivos en los que trabajamos.
Como los puntos de interés entre quienes formamos COMPARTE son muchos y muy amplios, hemos optado por centrarnos en algunos aspectos del trabajo que nos permitan obtener un producto modesto, pero posible, y que nos entrene en este intercambio de experiencias y saberes para los próximos 5 años (2014 – 2018). Así, en este tiempo, queremos constituirnos como:
- Una comunidad cohesionada y fortalecida, basada en valores humanos (solidaridad, cuidado de las personas, respeto y corresponsabilidad) enriquecidos por la espiritualidad ignaciana y con objetivos compartidos.
- Una comunidad que propone contenidos y metodologías que nacen de la práctica y que aportan al debate del desarrollo socioeconómico desde un enfoque alternativo.
- Una comunidad cuyo quehacer impacta en las organizaciones sociales que forman la comunidad y, a partir de él, se mejora el acompañamiento y las estrategias en los procesos económico-productivos en los que estamos involucrados.
- Una comunidad que trabaja de manera articulada, y que tiene alianzas estratégicas consolidadas con Universidades y agentes sociales y económicos de nuestro entorno e internacionales.
- Una comunidad que es capaz de difundir conocimiento y generar debate para incidir en políticas públicas y privadas que afectan a los procesos de desarrollo socioeconómico en nuestras regiones.