Ferias campesinas agroecológicas

El 94% de las tierras cultivables de Paraguay están ocupadas por cultivos para la exportación. El informe Con la soja al cuello recoge información rigurosa y concreta sobre el impacto de los agronegocios en el país entre 2013 y 2015. Denuncia las graves consecuencias de este modelo para la gente paraguaya y el desarrollo sostenible de su territorio.

El acelerado proceso de acaparamiento de tierras y el consiguiente desplazamiento forzado de la población campesina, la violación sistemática de los derechos humanos de las comunidades campesinas e indígenas, el aumento de las brechas de la desigualdad, los nefastos efectos en la salud y el ambiente, son solo algunas de las graves consecuencias de tal modelo.

Frente a esta simpatía desmedida del Estado paraguayo hacia el agronegocio, en especial del monocultivo de la soja, y a su inexistente apoyo al pequeño productor minifundario, hay quienes optan por no rendirse y resistir. La Asociación de Organizaciones Sociales de San Ignacio (AOSSI), formada por hombres y mujeres campesinas, es un ejemplo de resistencia y de construcción de alternativas locales. Cuentan con una marca campesina propia, hecha por ellos, patentada por ellos y para ellos. Esta marca es “Yvy poty”, vocablo guaraní que significa Frutos de la Tierra.

La Asociación de Organizaciones Sociales de San Ignacio (AOSSI) es apoyada por el Centro de Estudios Paraguayos Antonio Guasch – CEPAG, el cual forma parte de la Comunidad de Aprendizaje y Acción para el Desarrollo Alternativo – COMPARTE.

Lo que ocurre en Paraguay no es algo aislado, sino que es parte de la dinámica que se da a nivel planetario, es parte de la nueva lógica de acumulación. El ver la dinámica de los agronegocios en el mundo contribuye a tener una dimensión real de lo que está en juego. ¡Optemos por modelos sostenibles para las personas y los territorios donde vivimos!