“INCUBA”: Apuesta por el Desarrollo Integral de la Familia Campesina
“Si no se lucha en la vida, no se llega a nada” (Cheo). Esto dice un abuelo curado por el sol caribeño, que baila hasta con el bastón y que es dueño de la sabiduría que simboliza el ser cubano del campo que, en medio de una austeridad que resiste, su sonrisa y esperanza iluminan su rostro. Esta es la Cuba rural que, en su lucha del día a día, la acompaña un bongó, un son y el cuarto de Tula que en la Cachimba prendió candela.
Es en esta Cuba rural con la que trabaja el Centro Loyola de Santiago de Cuba y su programa INCUBA, a quienes ha visitado entre el 26 de mayo y 2 junio el Secretario Ejecutivo de COMPARTE, Álvaro Idarraga.
INCUBA es un programa del Centro Loyola de la Provincia de Santiago de Cuba que promueve experiencias emprendedoras de comunidades rurales de Santiago de Cuba. La experiencia se remonta a pocos años atrás cuando, a través del trabajo pastoral de la iglesia católica, se fue percibiendo la necesidad de aportar a la mejora de condiciones de las familias campesinas de la región.
El Centro Loyola nace en septiembre de 2014 y, desde ese momento, surge el programa INCUBA con el objetivo de promover una mentalidad emprendedora en la población campesina del territorio, que contribuya al desarrollo de pequeñas fincas integrales, ecológicas y de producción esencialmente orgánica, en apoyo al bienestar de la familia campesina y el desarrollo de la producción de alimentos en el país.
En primer lugar, INCUBA realiza diagnósticos participativos en todas las comunidades y fincas, lo que permite conocer cuáles son las fortalezas y debilidades, así como sus principales problemas y necesidades. En base a ello, asesora y acompaña a las familias campesinas para que organicen y administren adecuadamente su finca.
Producto de diferentes encuentros para capacitar en diferentes temas agropecuarios surgió la RED de SABERES POPULARES en cada una de las 4 comunidades donde trabaja y a nivel territorial, lo que ha permitido que se transmitan los conocimientos que tienen cada campesino y campesina sobre la crianza de animales y diversos cultivos. Además, fortalece vínculos de reciprocidad y solidaridad cuando las familias campesinas que han logrado buenas cosechas han realizado donaciones de sus producciones a los menos beneficiados y a Hogares Maternos.
El programa, además, cuenta con una línea de trabajo sobre desarrollo empresarial que tiene como objetivo lograr que las personas con vocación empresarial, conozcan las bases fundamentales para desarrollar exitosamente una micro o pequeña empresa sobre bases éticas y económicamente sustentables tanto en zonas rurales como urbanas.