Acabar con los privilegios y la concentración del poder para frenar la desigualdad extrema (Informe Oxfam, 2016)
Necesitamos con urgencia una “economía” al servicio de la humanidad y no la humanidad al servicio de la economía (o al servicio de unas pocas personas). Esto es lo que se deriva del informe de OXFAM en el que revela, según Credit Siusse, que el 1% más rico de la población mundial posee más riqueza que el 99% restante de la población del planeta.
El Pueblo de las Alternativas
No paran de repetir que el sistema que sufrimos no tiene alternativa, y no es verdad. Existen un montón de proyectos que buscan la sostenibilidad de la vida en lugar de buscar simple lucro. Son alternativas prácticas que están en nuestras manos.
Un pueblo que tiene alternativas es un pueblo vivo. Para demostrarlo, la Asamblea de la Carta de Derechos Sociales de Euskal Herria propone la realización del Pueblo de las Alternativas el próximo 24 de octubre en Bilbao. Reivindicación y fiesta, momento de encuentro y escaparate de las numerosas propuestas, grandes y pequeñas, que nos dan vida todos los días son solo algunos de los atractivos del programa. El objetivo es mostrar todas estas alternativas juntas e ir tejiendo una red entre ellas.
Con esta propuesta, se asume la llamada del movimiento Bizi! para organizar Pueblos de las Alternativas, con motivo de la Cumbre sobre Cambio Climático que tendrá lugar en París en diciembre de este año, con el lema “Cambiar el sistema, no el clima”. El punto de partida de esta iniciativa fue Alternatiba de Baiona que se celebró en 2013.
Para más información sobre el programa del Pueblo de las Alternativas, consulta el tríptico.
Un grupo de campesinos y campesinas, acompañados por el Centro de Estudios Paraguayos Antonio Guash – CEPAG en Paraguay, cree poder hacer algo luego de entender que ellos y ellas no son pobres, sino empobrecidos.
Nuestra realidad es que el Estado está ausente para el pequeño productor minifundario y con simpatía desmedida hacia el agronegocio; en especial del monocultivo de la soja.
Estos compañeros y compañeras se encuentran organizados en la Asociación de Organizaciones Sociales de San Ignacio (AOSSI).
Entre el 20 y 28 de abril, 60 representantes de organizaciones sociales y universidades jesuitas procedentes de Estados Unidos, Latinoamérica, África y Europa, se reunieron en Loyola y Bilbao para dialogar sobre cómo aportar a la construcción de una economía más humana. Las primeras conclusiones giran en torno a la importancia de las alianzas, de las alternativas para mantener medios de vida sostenibles y la participación en la construcción de las políticas públicas.
